BlizzCon 2023, mi opinión personal del evento
Ya pudimos ver el evento inaugural de la BlizzCon 2023 que desveló anuncios para varios de sus juegos, destacando especialmente la franquicia de Warcraft. Aquí me centraré en eso y el breve teaser de «Vessel of Hatred», la nueva expansión de Diablo IV para finales del próximo año.
Sé que mucha gente está emocionada por las novedades de World of Warcraft y me alegro de que sea así. Quizá me volví viejo y gruñón, pero yo no pude ilusionarme ni siquiera con el clásico vídeo de promoción. ¿Por qué? Vamos por partes con mi opinión sobre dichos anuncios.
World of Warcraft: The War Within

Pues así es, nueva expansión para el famoso MMORPG que no viene sola; formará parte de una «trilogía» de ampliaciones de una saga llamada «World-soul». Si os sonó raro, lo entiendo; parece que Blizzard probará una nueva estructura de lanzamiento de contenido. Con el corazón os digo que ojalá sea para bien… pero a mí no me inspira confianza.
Como siempre, el anuncio de la expansión viene acompañado de una cinemática con un CGI de asombrosa calidad (vídeo). A nivel visual es impresionante, pero la veo falta de buen contenido narrativo, más allá de una emotividad que siento artificial sin el contexto adecuado. Ahora mismo no soy capaz de conectar. Me encantan Anduin y Thrall, se ven genial… pero necesitan construir mejor este momento en cuestión.
Con la cabeza fría, soy capaz de ver las partes positivas de la temática que se nos viene encima y deseo de verdad que el plan salga bien. ¡Por lo menos en cuanto a novedades jugables (vídeo)! Sin embargo, siento que Blizzard está más pendiente de refrescar la trama que de arreglar errores argumentales del pasado. Y eso puede funcionar con Dragonflight, pero aquí no sirve.
Thrall y Anduin son personajes importantísimos que arrastran demasiadas cosas de tramas anteriores. El último rey de la Alianza tuvo un genial desarrollo a lo largo de World of Warcraft, pero necesitamos resolver su última aparición de Shadowlands antes de ponernos con otra cosa. En cuanto a Thrall, el querido personaje dio tantos tumbos en los últimos años que ahora resulta difícil ubicarlo. En fin… ya veremos.
Cataclysm… ¿Classic?

Aquí lo siento, pero se me acaba la simpatía. Lo de «Cataclysm Classic» a estas alturas es un chiste que se cuenta solo. Y no me molesta por la expansión en si, ¡que a mi me encantó! Lo problemático del tema es que se desvían unos recursos y le dan la relevancia que debería dirigirse tanto a la expansión contemporánea de turno, como a otros títulos de Blizzard abandonados.
Lo peor del tema es que la presentación del re-cataclismo me llamó más a volver al MMORPG que el anuncio de la propia The War Within. Entiendo perfectamente que con lanzamientos como Wrath of the Lich King o Cataclysm la gente se vuelva a ilusionar por la nostalgia. ¡Pero no creo que hagamos bien en centrarnos en estas cosas!
En cualquier caso, como ya estará ahí, será una opción más. Para mí el Classic es un lastre, por disfrutable que sea. Al fin y al cabo, mientras salen novedades para ese modo de juego, al WoW contemporáneo le falta contenido, dejan tirado juegazos como Heroes of the Storm y mantienen muertas franquicias tan potentes como Starcraft. Aunque parece que Microsoft le echó el ojo…
Diablo IV: Vessel of Hatred

No voy a dar detalles de lo que veremos en la expansión por si le destripo algo a alguien, pero quienes completamos el juego sabemos de sobra lo que se viene. Ya lo imaginábamos y tanto el nombre como el teaser lo confirman. Entendemos a quién pueden referirse con ese título… ¡y me alegra que sea así! Casi pensé que dejarían esa trama reposar, pero parece que seguiremos por ahí. Que alivio.
Lo doloroso es que todavía falta mínimo todo un año para que vea la luz. Vessel of Hatred apunta a finales de 2024, y eso sin contar posibles retrasos. Teniendo en cuenta el nivel narrativo de las temporadas de Diablo IV, vamos a estar un largo tiempo sin calidad en el argumento de la historia. Una verdadera pena, pero es normal; es muy pronto para una expansión importante. Lo que deberían hacer es mejorar las temporadas.
También anunciaron novedades y eventos para la actual de Sangre, y seguro que siguen sacando contenido… pero a mí personalmente me pesará mucho la espera. En cualquier caso, si es para sacar una expansión tan potente como lo fueron Lord of Destruction o Reaper of Souls… ¡esperaré y punto! No es que vayan a faltar juegazos en 2024 para entretenernos.
Conclusiones

Una BlizzCon algo deslucida para mí, pues el contenido que me interesaba de verdad (Vessel of Hatred) queda muy lejos y lo mostrado del universo Warcraft no consigue ilusionarme. ¡Lo bueno es que la situación solo puede mejorar, si es que cambia! Deseo fervientemente estar equivocado y que The War Within devuelva su MMORPG al olimpo.
Quizá se deba a que estoy un poco cansado de vivir de expectativas de futuro con respecto a Blizzard, más todavía a día de hoy. Confiaría en lo que está por venir si no me hubiesen fallado antes con este tipo de estrategias… pero lamentablemente sucedió más de una vez. Eso sí, aquellos que estáis ilusionados, ¡no permitáis que yo os baje los ánimos!
Y poco más que comentar, la verdad. Overwatch y Hearthstone no me interesan, y Warcraft Rumble acaba de salir. ¿Viviremos la vuelta de Starcraft en la siguiente BlizzCon? ¡Ojalá! Hasta entonces, os recuerdo que tengo en proceso la serie dedicada a la historia de Diablo IV, para apaciguar un poco las ganas de su lejana expansión. ¡Ya vamos por el acto IV!