Corpse Party 2021 y el terror estudiantil
Tras resistírseme durante un tiempo considerable, acabé adquiriendo la nueva versión 2021 de Corpse Party y decidí darle una oportunidad. Quizá algunos recuerden que recomendé el anime que se basa en el original, pero ahí todavía no había completado el videojuego al 100%. Ahora sí, y aquí me tenéis.
Seguramente muchos no lo conozcáis; Corpse Party es una experiencia «de nicho», como suele decirse. Estamos ante la versión retocada de un viejo clásico de terror japonés donde controlaremos a varios estudiantes atrapados en un colegio maldito y debemos sobrevivir mientras desvelamos el misterio del lugar para escapar de dicha pesadilla.
Está disponible en PC y Nintendo Switch, así que para echarle un mejor vistazo podéis acudir a los mencionados enlaces. ¡Ahora, vamos con la reseña!
Estudiantes en peligro

Algo que fascina a muchísima gente en el terreno de la ficción es juntar a unos cuantos jóvenes de instituto para que sufran algún tipo de maldición o situación que ponga en peligro sus vidas. Esto es precisamente el tipo de historia que encontramos en Corpse Party y su inicio no se anda con rodeos para llevarnos hasta ahí.
Cuando nuestros estudiantes caen acaban atrapados en el tenebroso colegio estarán separados, por lo que nos tocará controlarlos en pequeños grupos según toque durante la historia. Es cierto que los conoceremos un poco mientras avanzamos, pero no os ilusionéis, pues no gozan de gran profundidad.
Aquí el principal atractivo es descubrir cómo sobrevivirán los protagonistas, quién morirá y de qué manera. Además, como contamos con bastantes finales alternativos (todos ellos «malos»), podremos descubrir la forma en que caerán muchos de ellos tras tomar las decisiones equivocadas.
En general, la experiencia es agradable y entretenida, con algún desvío de los acontecimientos bastante retorcido e inquietante. Y esta versión 2021 es la más completa en cuanto a capítulos extra ajenos a la historia principal, para así ponernos en contexto sobre muchos de los desdichados personajes del juego.
Muriendo en el «cole»

Su jugabilidad es sencilla: nos desplazamos en cuatro direcciones al estilo de los antiguos Pokémon y nuestra misión será explorar la escuela, encontrando objetos e información que nos ayude a avanzar, sorteando obstáculos y peligros para no morir en el proceso. Eso sí, el juego va dejando caer sutiles pistas antes de cada percance.
Dicho eso, lo cierto es que la experiencia es más exigente de lo que parece. Caeremos en varios «finales equivocados» donde nuestros personajes morirán si el peligro les alcanza o no hacemos las cosas de forma correcta. Y el problema está en que, sin hacer uso de guía, resulta complicado acertar a la primera.
Durante la partida debemos localizar objetos esenciales para obtener el mejor desenlace en cada capítulo, pero no podemos limitarnos a explorar a lo loco, pues nuestros pasos pueden llevarnos a la muerte… Incluso curiosear ciertas notas o documentos será fatal para los protagonistas. ¡Y no hay tantos puntos de guardado!
Sabiendo a lo que vas, Corpse Party puede ser entretenido, pues nunca sabemos con qué nos toparemos. Su poco intimidante pixel-art se compensa no solo con bellas (y retorcidas) imágenes estilo anime; también estaremos asustados a cada movimiento, pues según lo que hagamos, podría ser el último.
Conclusiones

Está claro que Corpse Party, aun en su versión de 2021, no es un juego para todo el mundo… y está en inglés. Es un survival horror distinto, que peina canas, pero a día de hoy sigue proponiendo una aventura bastante agradable si os gustan las historias de «miedo adolescente» y toleráis los juegos clásicos.
Si lo adquirís y os agobia la experiencia, siempre podéis utilizar una guía para resolver todos esos problemas, disfrutando simplemente de la historia verdadera y/o sus múltiples finales equivocados. Pero si me preguntáis a mí, yo os recomendaría armaros de paciencia e intentarlo a ciegas, que es más divertido.
Y recordad: cuenta con una pequeña serie de cuatro capítulos que adapta bastante bien la historia del juego, con los mismos personajes y ofreciendo un final alternativo. Es buena idea verla después de completar la partida… o antes de hacerlo, si es que el juego por si mismo no os llamaba lo suficiente.
¿Os acaba enganchando? Pues sabed también que tiene un par de continuaciones: Book of Shadows, Sweet Sachiko’s Hysteric Birthday Bash y luego Blood Drive. De ellos poco os puedo decir, pues yo todavía los tengo pendientes.