Romances idílicos en Dragon Age: Inquisition

Uno de los puntos fuertes de los juegos de Bioware son los romances, eso es así. Tanto, que mucho fandom es en gran parte fan de los juegos precisamente por los compañeros. No por nada se encienden las publicaciones de Bioware cada vez que postean algo sobre ellos. Con más de mil horas de juego puedo decir que he probado muchas cosas y muchas alternativas y me he animado a hacer un top de los que considero romances idílicos en Dragon Age Inquisition. ¿Con ésto a qué me refiero? pues a que hay unos inquisidores concretos que para mí hacen mejor match con un compañero u otro.

Obviamente la magia de Dragon Age es que el jugador pueda ser cualquier tipo de personaje personalizado y romancear al compañero que le guste (con algunas restricciones de orientación y gustos) así que esto es simplemente mi lista personal. Explicaré por qué estas parejas para mí son las idílicas y aprovecharé para ponerlas en orden de preferencia. 

Nota: el orden de preferencia será por cómo funciona el romance. No tiene nada que ver que ese compañero pueda gustarme más o menos que los otros, eso ya sería otro cantar.

8
Toro de hierro

Inquisidor/a Adaar, qunari guerrero/a o pícaro/a. Sé que Toro es muy popular y que mucha gente me colgaría por ponerlo el último, pero es que esto es una lista personal y a mí su romance me dejó un poco fría. Su estilo de, digamos, machote alfa que decide lo que necesitas, pues no me va. La escena en la que todo quisqui le ve en bolas es divertida, pero a mí me pareció un poco porque sí. El hecho de que le de una torta en el culo a su kadan en los encuentros… no sé, son cositas que no me hicieron conectar. Como compañero sí me parece genial, aunque no suelo llevarlo mucho porque Cassandra suele ser mi guerrera. Pero siempre es divertido ir con él a cazar dragones. 

Toro tiene un conflicto interno entre su personalidad, fuertemente influenciada por su vida en el sur, y su disciplina qunari, algo en lo que en el juego podemos influir. Yo hice su romance con una qunari y me pareció que encajaba muy bien con él. Adaar es un/a vashoth, no nacido/a en el qun, y creo que le da mucha vida a la incertidumbre de Toro. Adaar es “libre en sus afecciones” como dice Fenris en DAII sobre los guerreros de la bruma y eso es algo que Toro desconoce. Sí, puede parecer que tiene mucho viaje en esto del sexo, pero en el amor romántico no tiene ni idea. Es bonito ver su cara de ternura cuando le damos el colmillo de dragón y él empieza a llamarnos Kadan. 

Lo de ser guerrero/a o pícaro/a es porque Toro detesta a los magos. Sí, trata con ellos, de hecho tiene una maga dalish en su grupo, pero no le hacen mucha gracia. Si nuestro/a Adaar es mago/a no pasa nada en el juego, pero a nivel de rolear quizás haría que conectaran peor. Un Adaar guerrero al que le guste romper cosas siempre va a estar más unido a Toro (con la chica igual).

7
Sera

Inquisidora Adaar, qunari guerrera o pícara. Sera siente fascinación por las qunari, algo que deja de manifiesto desde la primera vez que te ve y también en algunas conversaciones de grupo. Como dije antes, la inquisidora qunari es una vashoth, nunca ha conocido el qun, así que puede encajar perfectamente una relación romántica. Si elegimos a esta inquisidora el romance se ve fluido y sin los problemas que podemos encontrarnos con la elfa (Sera piensa que los dalishanos pierden el tiempo) o con la humana (que es noble). Sera tampoco es muy fan de los magos, por eso ponernos de parte de ellos puede hacer que conectemos peor con ella, de ahí que es más conveniente que seamos guerrera o pícara y que nos posicionemos con los templarios. Es un romance que también podría funcionar con una enana, pero bueno, a mí me parece que la qunari es perfecta para Sera. 

En si el romance es sencillo y en ocasiones muy caótico, incluso teniendo conversaciones casi sin sentido (muy en la línea de Sera). Tiene sus momentos tiernos en los que se muestra la importancia que tiene la inquisidora para Sera, como cuando ella siente inmensa alegría al enterarse de que aquella ha ido cantando a los cuatro vientos que son amantes. Yo personalmente la he puesto muy abajo en el top porque me parece un romance que no está muy equilibrado, me explico: casi toda la relación se basa en lo que Sera quiere o necesita, apenas muestra preocupación por su pareja. Incluso cuando le dice que le da miedo perderla, la conversación se basa en que ella no quiere tener que pasar por eso. 

Algo que tampoco me pareció bien hilado fue el tema de la boda en el DLC Intruso. Incluso la inquisidora le recuerda a Sera que ella no cree en ese tipo de contratos. Me resulta raro ver a una persona tan libertina como Sera comprometiéndose de esa forma, tal vez hubiera sido mejor dejar la relación como una relación sin las ataduras burocráticas que ella critica. Tampoco me gustó ver a Sera con el vestido blanco y la inquisidora con el horrible traje de Orlais, hubiera sido más bonito verlas a ambas igual, aunque esto es ya una crítica muy subjetiva por mi parte al equipo creativo.

6
Cassandra

Inquisidor Trevelyan, humano guerrero. Cassandra tiene un ideal muy específico de lo que busca en un hombre y es muy clara al respecto. Ella parece muy dura e insensible pero la realidad es que se nos descubre como una romántica idealista llena de pasión. Es uno de los compañeros más complicados de convencer y hay que decidir bien lo que hacemos y decimos. Mi apuesta para ella es el humano noble, ya que en la casa Trevelyan son devotos y eso hace más fácil rolear un personaje educado y andrastino. Ponernos de parte de los templarios y proteger a la capilla son elecciones claves para que este romance fluya como la seda. El hecho de ser guerrero también ayuda, ya que suelen ser personajes directos que no pierden el tiempo en tonterías ni suelen tener una escala moral de grises. Si eres un hombre honrado y bueno que antepone el deber por encima de todo, tienes el camino abierto hacia ella. 

El romance con Cassandra es bastante completo. Tiene una evolución a mi parecer lógica, sobre todo porque ella al principio se niega a aceptar que es amor (como en la canción de Megara en la peli Disney de Hércules). Entender bien a este personaje es complicado pues es más abierta de lo que parece y clásica cuando menos te lo esperas. Cuando nos tomamos la molestia de comprenderla y estar a su altura, se sienten cómodas y bellas las escenas que comparten juntos. No lo he puesto muy arriba en el top porque al final Cassandra siempre va a anteponer su deber, lo que significa que si es llamada a ser Divina ella cortará la relación. Esto no es necesariamente malo, al fin y al cabo cada uno tiene sus prioridades en la vida, pero hace que pierda la categoría de romance idílico, qué le vamos a hacer.

5
Josephine

Inquisidor/a Trevelyan, humano/a pícaro/a o guerrero/a. Nuestra diplomática favorita es una joven muy versada en el juego de la corte pero muy inocente en el mundo de los amoríos, tal y como nos dice Leliana. Su romance es un clásico entre los clásicos, con duelo por amor incluido. Las interacciones románticas hacia ella están llenas de cortesía y alaban constantemente lo dulce y brillante que es ella. Todas estas cosas hacen que el inquisidor ideal sea el noble, alguien bien versado en la alta cuna. Yo hice su romance con una humana noble y me pareció perfecto por todos lados. Eso sí, la hice pícara con su personalidad traviesa, para apelar un poco al pasado pillín que Josie compartió con Leliana. He dejado fuera al mago o maga porque al haber sido criados en el círculo pues no tienen la educación que tienen los otros dos y pierde juego la cosa. 

Es un romance sencillo al que tal vez le faltaron escenas, pero es normal teniendo en cuenta que ella es una asesora, no una compañera oficial de nuestro protagonista. Cumple lo justo y la escena del duelo es bastante buena, sobre todo con la salida que se trae el Lord Adorno Ciel Otranto de Antiva. Uno no se puede interponer en el camino del amor, eso es así. Algo que a mí no me cuadró mucho, teniendo en cuenta el rollo cuento clásico que tiene el romance con Josie, es que en el DLC Intruso no haya casamiento. Lo pusieron con personajes como Cullen o Sera, y sin embargo no está esa opción con nuestra romántica clásica.

4
Blackwall

Cualquier inquisidora. Yo hice este romance con la inquisidora Cadash porque quería jugar con la enana y pensé que, teniendo en cuenta que pertenece al cártel, tal vez podía entender mejor la historia de Blackwall (ya me la sabía). La verdad es que me quedó un romance muy fluido. El ser una pícara enana del cártel hacía que mi personaje entendiera lo que es verse jodido y tomar decisiones difíciles. Aunque también podríamos pensar que no se sentiría atraída de entrada por un hombre de apariencia noble y cortés. Aquí podría servir mejor una Trevelyan. La verdad es que con Blackwall cualquiera podría funcionar, incluso con cualquier clase ya que él es bastante abierto de miras y admira al inquisidor sea lo que sea. 

Me gustó su romance, sobre todo el giro dramático que da. Me encantó ver su conflicto interno al intentar contarle la verdad a la inquisidora. Yo ya sabía que él era Thom Rainier así que vi con otra perspectiva los intentos que hace de ser sincero, supongo que para quien lo elija en su primera partida tiene que ser mucho más chocante todo. Quizá por eso pude apreciar más este romance, porque ya sabía lo que él había hecho. Esa sensación que nos puede dar de que nos da largas por ser guardia gris cuando en realidad es por muchas más cosas, me parece una hilada muy genuina por parte de Bioware. El momento en que se derrumba y nos confiesa todo es muy bueno.

3
Solas

Inquisidora Lavellan, elfa maga. Aquí no hay más opción que ser elfa, lo cual tiene todo el sentido del mundo si pensamos en las prioridades de Solas. Fue mi primer romance y me dejó muy impactada para bien y para mal. Para bien porque conseguir gustarle a personajes tan complejos y tan puestos en sus cosas como Solas es complicado y a la vez gratificante. Escuchar su voz diciendo “Vhenan” cada vez que te acercas siempre es bonito. Para mal porque te abandona, te hace sufrir un DLC entero hasta que encuentras respuestas y luego te abandona otra vez. Ya te vale, Bioware. 

Este romance, si te lo tomas en serio, es duro. Está lleno de matices interesantes, como la escena de la vallaslin, que nos desvela mucho del pasado de los dalish, y las interacciones sobre magia (por eso elegí la elfa maga). Si nuestra inquisidora es maga él ve su inteligencia y sensibilidad, que son aspectos que le van a atraer mucho de Lavellan. Solas es casi el personaje más importante del juego y el romance con él nos acerca a facetas suyas que no veremos de otra manera, así que es un romance necesario para comprender al que será posiblemente el villano (o no) del siguiente juego. Algo que no me gusta, y que demuestra que fue un romance añadido a última hora, es que no contamos con la opción de “pasar el rato” que tenemos con otros compañeros. 

Solas nos parte el corazón, eso es así. Aquí es donde yo creo que nos vemos a nosotros mismos como somos, por cómo tratamos a los compañeros que nos hacen jugadas y subterfugios. Yo personalmente quiero salvarlo de su destino y ojalá Bioware nos dé esa posibilidad en el futuro. De hecho, lo que menos me gusta de este romance, y el motivo por el que considero otros mejores, es que no nos permiten irnos con él al final del DLC Intruso. Si nuestra inquisidora no iba a ser la prota del siguiente juego ¿qué sentido tiene que nuestra dalish no pueda seguir a su amado?. Solas nos dice que no quiere que la elfa vea en qué se convertirá. Una excusa. La realidad es que sabe que ella puede influir en él y su misión es demasiado importante para anteponer lo que él quiere, porque yo sí creo que su amor hacia Lavellan es genuino. Una muestra de ello es que se presenta en los sueños de ella en forma de lobo. Veremos qué sucede. Estamos expectantes, Bioware.

2
Dorian

Inquisidor Lavellan, elfo pícaro. Nuestro maravillo Dorian es de Tevinter, una nación que tiene esclavizados a los elfos, por lo que las interacciones entre Lavellan y Dorian son interesantes y el hecho de que el mago se enamore de nuestro elfillo dalishano me parece simplemente genial. Dorian es mi segundo romance favorito y también es mi segundo romance canon (el primero es Solas). Su personalidad y cómo evoluciona el romance son aspectos que lo hacen muy fluido, divertido y simplemente precioso. 

Una de mis partidas más jugadas la hago con mi elfo y su romance siempre es Dorian. Me gustan las interacciones que tienen, cómo él se siente intrigado hacia el elfo y cómo le brilla la cara de felicidad cuando decides continuar la relación. Ver su faceta vulnerable y apoyarle incondicionalmente se siente muy bien. Sinceramente esta pareja son el vivo ejemplo del I was made for loving u baby de Kiss. Su unión se siente tan natural que es imposible evitarla, al menos para mí. No hay Lavellan chico sin Dorian en mi Dragon Age. Normalmente yo juego con el guerrero para poder llevar la party que me gusta en difícil (Solas, Dorian y Varric/Cole) pero la personalidad de mi elfo siempre es pícara, lo que le da mucho juego y diversión a las interacciones con Dorian. Dorian es un crítico nihilista y la personalidad pícara le hace feliz. 

Lo que hace que haya perdido la categoría de número uno es simplemente que al final del DLC Intruso Dorian se marcha a Tevinter y no puedes ir con él. Entiendo sus motivos pero a mí me gustan demasiado los “y vivieron felices para siempre” así que las despedidas no me gustan. Espero que en el siguiente juego, en el que seguramente salga Dorian, haya mención al inquisidor y una especial si hubo romance. Me parecería terrible si no fuera el caso. Espero que Bioware se porte.

1
Cullen

Inquisidora Trevelyan, humana maga. Nuestro comandante es la quintaesencia del romance soñado. A mí personalmente me suelen gustar los compañeros cuanto más raritos mejor, pero debo admitir que en cuanto a romances Cullen gana por goleada a todos los demás. No es de extrañar, está hecho para que sea así (good job, Bioware). Nuestro rizitos (como lo llama Varric) parece un señor resentido con el mundo que lo arregla todo a martillazos (como diría Josephine) pero esconde en su interior a un auténtico romántico. 

Elegí a la humana maga porque los que venimos de Origins sabemos que Cullen sentía mucho aprecio por Amell (la guarda gris humana maga, prima de Hawke por parte de madre) y sintió mucho su partida. Esto es algo que él te cuenta (si en Origins jugamos con Amell) y me pareció una hermosa ironía que se volviera a enamorar de una maga. Cullen ha sufrido mucho por los magos, él mismo te confiesa que si no fuera por ti habría pasado la vida pensando que no merecen la misma consideración que los no magos. Esta línea de diálogo me pareció maravillosa y por eso creo que elegir a la maga es un destino perfecto para que Cullen esté en paz consigo mismo. Podría funcionar con la maga elfa, pero creo que el hecho de que nuestra prota haya sido del círculo hace mucho más interesante la historia. Y ya, si queréis rolear al máximo, podéis ponerle a vuestra inquisidora la marca del Círculo de magos en la frente, dando a entender que era una tranquila antes de ser tocada por el velo. Eso ya me parece diez de diez. 

La parte mala es que al ser maga lo normal es que nos aliemos con los magos y no con los templarios (a no ser que seamos pro Círculo como Vivienne, que también es posible), por lo que nos perdemos una línea de diálogo en la que él nos pide que tengamos cuidado en Refugio (al atacarnos Corifeus al principio). Pero bueno, tampoco es un momento muy necesario para este romance. 

Hay escenas muy buenas aquí. La escena de conexión física que deja ver lo lanzado que puede ser nuestro templario… La escena en la que nos regala su moneda de la suerte… Cuando encuentra al mabari en el DLC Intruso y nos pide matrimonio… Todos los momentos con este hombre son muy buenos y se sienten muy fluidos. Teniendo en cuenta que hablamos de un juego de fantasía medieval, para mí el romance de Cullen cumple con todos los requisitos y por eso lo he puesto como el número 1. Porque se lo merece.

Saga Dragon Age